El hada del signo de Libra: la Dama Holda

Para los que nacieron bajo el signo de la balanza hay un mandato primordial: conservar el equilibrio de la vida, de lo material, del corazón a toda costa. Para los Libra la falta de equilibrio es el caos. Contienen sus emociones, sus actos, sus palabras...

Nunca hacen ni dicen nada que no hayan meditado profundamente. Son maestros en los artes de la negociación y la diplomacia, y saben conservar la cabeza sobre los hombros incluso en las situaciones más terribles. Son líderes que velan por el bien de sus equipos, e ingenieros que comprenden la importancia de cada pieza de la maquinaria, por pequeña que sea.

Este signo requiere de un hada que pueda operar cambios rápidos sobre las cosas, que de un momento a otro pueda devolver equilibrio y ecuanimidad a toda situación, que dé un giro a los eventos y los haga favorables para Libra, sin alterar el orden natural. Esa hada es, sin duda, la Dama Holda.

La Dama Holda es un hada que reina sobre las tormentas y las ventiscas. De alguna manera es el opuesto a los Libra, que representan el orden y la mesura. Para Holda el movimiento es un requisito esencial de la vida, pero también reconoce la necesidad de los periodos de calma como escenario para que las raíces se afiancen y los logros se disfruten. Por ello ha tomado bajo su protección a los Libra, que buscan ese orden y esa serenidad que esta hada rara vez puede disfrutar.

Puede ocurrir que la búsqueda de equilibrio de un Libra lo lleve al punto de dejar su vida inmóvil, y que por ello renuncie al natural movimiento que nos impulsa a avanzar y crecer. Cuando sienta que todo amenaza con desfallecer de este modo, el Libra puede invocar a Holda con este rezo:

“Tú que dispones la furia y dirección de los vientos, que das el rumbo a los barcos y a los huracanes, que decides el destino del naufrago y del ave migrante, que mueves y destruyes, o que dejas intacto. Tú que reinas sobre los vientos del caos y las tormentas del cambio, que no dejas grano de arena sin movimiento, abre mis ojos ante el mapa del mundo, y ayúdame a penetrar en sus secretos. Hazme comprender mi lugar en la Creación, y dame la fuerza para cambiar y cambiarme, para arder y renacer en el fuego de tu corazón.”

Si se hace con devoción, la gracia será concedida sin duda alguna.

Para que Holda se acerque a tu morada, deja las ventanas abiertas, y ata a ellas móviles hechos con plumas y hojas. También puedes soplar un diente de león en el centro de tu dormitorio, y dejar que sus pequeños hilos dibujen el sendero que dé guía al hada Holda.