El Alfanje es el arma árabe por excelencia, reservada sólo para la realeza. Se trata de un pequeño cuchillo de hoja curva, muy pronunciada, con doble filo en el remate de su hoja. Con un mango revestido por piedras preciosas, esta es un arma que requiere de gran habilidad, y que sólo puede ser enarbolada por expertos en su manejo: su hoja es tan corta que puede herir a quien la empuña si no es lo bastante hábil.

Los Alfanje son personas activas, seductoras, seguras de sí mismas, al punto de que pueden parecer agresivas. Magnéticas y de gran atractivo físico, trabajadoras y con una enorme capacidad para ser líderes. Son personas que tienen, sin embargo, una gran debilidad.

Podemos decir que su peor enemigo son ellas mismas.

Si naciste bajo este signo, deber ser precavido con tus dones, pues tu natural belleza y tu don de mando te pueden llevar a lastimarte a ti mismo y a los que amas. Tiendes a ser un seductor imparable, que se guía más por el número de relaciones que por su relevancia. En el trabajo, aunque eres perfeccionista, puedes creerte infalible sin esfuerzo.

Piensa en el Alfanje, en esa arma que hiere a quien no honra su manejo.