(Del 1 al 10 de abril, y del 4 al 13 de octubre)

Este árbol de gran tronco y madera resistente era utilizado por los celtas para construir casas y puentes. Por su fuerza era venerado por los druidas como un templo en sí mismo. Los sacerdotes le tallaban una cruz en la corteza, y celebraban ritos y ceremonias a su gran sombra.

Si este es tu árbol natal, eres una persona de gran espiritualidad, con un don natural para enseñar sobre los lazos entre los mundos material e intangible. Sabes, como los druidas, que hay más de una realidad, pero que la vida es sagrada, pues de cada uno de nosotros sólo hay un espécimen.

Eres una persona compasiva y empática, que guarda silencio antes que atreverse a emitir una crítica que hiera. Sabes ser un gran maestro y un consejero comprensivo. Mides a la gente no por lo que es, sino por lo que debe aprender. Y estás deseoso de enseñarles.

Vives con los ojos bien abiertos, y con la mente receptiva. En ti no caben los prejuicios. Amas a toda clase de personas, y por ello tus familias exceden los lazos de sangre. Eres hermano de todos, pero no perteneces a nadie.

AMULETO: Un puño de tierra del pie del serbal, en una cajita roja.